Aunque ya he anunciado que
en éste blog no abordaría aspectos de la Psiquiatría , por
lo que se refiere a la medicación, sí expondré aspectos que tienen que
ver con la condición
especial que tiene el paciente con conductas suicidas, que lo diferencia del
resto de los pacientes.
Los requisitos para un
tratamiento psiquiátrico, que pueda sostenerse en el tiempo, para que sea
efectivo el tratamiento ambulatorio:
1) “Establecer y mantener la ALIANZA TERAPÉUTICA ”:
· La ideación y las conductas suicidas pueden explorarse y
tratarse en el contexto de una relación de colaboración médico- paciente.
· con el objetivo final de reducir el riesgo ..
·No es lo mismo tener la responsabilidad de atender al paciente, que tener la responsabilidad de la VIDA del paciente”.(1)
2) “Establecer la seguridad del paciente:
· Para los pacientes en ámbitos de tratamiento de urgencias u
hospitalización, hay que tomar en consideración la posibilidad de realizar una
observación individualizada o una monitorización continua (con un circuito
cerrado de televisión sería ideal)
· Hasta que se pueda completar la valoración del riesgo de
suicidio o cuando se estima que el paciente tiene un riesgo de suicidio
elevado.
· Retirar los objetos potencialmente peligrosos de la
habitación del paciente (si está hospitalizado, y poner en lugar seguro sus
pertenencias).
· Considerar la posibilidad de revisar la posesión de objetos
potencialmente peligrosos mediante registros a los pacientes o con detectores
de metales”(1).
3)“Determinar el ámbito de tratamiento:
· Realizar el tratamiento en el ámbito que sea menos
restrictivo y que proporcione el máximo de seguridad y eficacia.
· Tener en cuenta la estimación del riesgo de suicidio y la
peligrosidad potencial para los demás.
· Reevaluar el ámbito de tratamiento óptimo y la capacidad del
paciente para beneficiarse de un nivel de atención distinto basándose en el
curso del tratamiento”(1).
4) “ Desarrollar un plan de tratamiento:
· Analizar los beneficios potenciales y los efectos secundarios
de cada opción teniendo en cuenta la información sobre las preferencias del
paciente.
· Valorar la presencia de trastornos por consumo de sustancias.
· Proporcionar un seguimiento más intensivo en las etapas
iniciales de tratamiento para proporcionar apoyo e instaurar un tratamiento de
forma rápida.
· Revisar con los pacientes ambulatorios las directrices para
abordar exacerbaciones de las tendencias suicidas u otros síntomas que puedan
manifestarse entre una visita programada y la siguiente”.(1)
5) “Coordinar la asistencia y colaborar con otros profesionales:
- Establecer claramente:
+ La definición de roles, + una
comunicación habitual entre los miembros del equipo
+ un plan
anticipado de gestión y tratamiento de la crisis.
- Establecer una buena comunicación con otras personas que
asistan al paciente, incluyendo otros médicos que le traten por enfermedades
médicas generales u otras psiquiátricas o psicólogos que puedan administrarle
terapia.
- Establecer pautas de contacto para el caso de que se
produzcan cambios clínicos importantes.
6) “Promover la adhesión al plan de tratamiento:
- Establecer una relación positiva médico- paciente.
- Crear una atmósfera en la que el paciente se sienta libre
para discutir sobre los aspectos positivos y negativos del tratamiento(1)”(*)
7) “Reevaluar la seguridad y el riesgo de suicidio:
- Debido a la naturaleza cambiante del suicida, repetir las
evaluaciones a lo largo del tiempo para información sobre ámbitos y
circunstancias.
- Repetir las evaluaciones del suicida en ámbitos hospitalarios
en las fases críticas del tratamiento (por ej., cambios en el nivel de
privilegios, cambio repentino en el estado mental, y antes del alta).
- Reevaluar la posibilidad e suicidio si cuando se entrevistó
inicialmente al paciente éste estaba intoxicado por el alcohol u otras
sustancias"(1).
8) “Controlar el estado
psiquiátrico y la respuesta al tratamiento:
- Durante las primeras fases
del tratamiento es especialmente importante el seguimiento.
- Debido a que algunos fármacos pueden tardar varias semanas en
proporcionar resultados terapéuticos.
- Puede darse un aumento en el riesgo de suicidio en las fases
iniciales, justo cuando empiezan a remitir los síntomas depresivos pero no
están aún totalmente resueltos.”(1)(**)
BIBLIOGRAFIA CONSULTADA:
(1(1) Basile, Héctor:“Prevención
del suicidio en el adolescente”, Biblioteca Virtual de Psicopatología,
2010.
COMENTARIOS:
(*) En
blogs anteriores comenté la necesidad de que la administración de la medicación
esté supervisada por personal de salud del efector más próximo al domicilio, a
los fines de verificar que se lo administre correctamente y no lo suspenda, por
las consecuencias fatales que ello conlleva.
(**) Es un grave riesgo el creer que porque un
paciente empezó a tomar la medicación, ya podemos estar tranquilos de que no va
a cometer un acto autolesivo; por el contrario, gracias a la medicación el
paciente puede recuperar rápidamente la energía, pero aún persiste la ideación
suicida, los motivos que lo llevaron a esa ideación no se han superado, y es
justamente el momento de mayor riesgo, porque tiene la energía suficiente para
realizar un acto contra sí mismo.